OPINIÓN:
En esta historia cuenta que Max y Amarilla, en su niñez habían construido una casa de madera en un árbol con Leonid y Bayet, duraron tres días armándola a Max se le metió la día de que aquella casa iba hacer para la niña que unas semanas atrás no sea atrevía a decirle nada.
Poco a poco la casa de madera se fue llevando de revista de imágenes de mujeres suecas por tanto aquellos niños se fueron enamorando de una mujer llamada Inga con todos sus atributos físicos, Estos tres pequeños le escriben una carta expresando que la amaban sin haberla conocido y al cabo de unos meses recibieron una respuesta que los hizo despertar a la realidad.
En nuestra niñez todos fuimos inocentes y vivíamos de ilusiones, creíamos que todo era facial de vivir, de crear, de soñar, pero al ir afrontando la realidad nos damos cuenta que la vida es otra, que todo es un esfuerzo para lograr tener lo que anhelamos.
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